Boletín # 2 (julio del 2000) - Indice

NOTICIAS INTERNACIONALES

Cooperación Danesa para ambiente boliviano

La contaminación minera forma parte de las preocupaciones de los países que han devastado el ambiente durante décadas promoviendo la minería nacional.

Es el caso de Bolivia cuya historia minera data de antes de la llegada de los españoles y la explotación del simbólico Cerro Rico de Potosí.

Potosí ha sido considerada ciudad patrimonio histórico de la humanidad. Allí se encuentra el edificio que albergó las riquezas que los españoles embarcaban hacia la península ibérica y que según se dice, el metal alcanzaba para construir un puente entre Bolivia y España. Sin embargo los mas de veinte trapiches que aún existen enclavados en la ciudad de Potosí descargan sus relaves al río que trechos entubado, trechos abiertos, recorre la ladera de la ciudad para desembocar en el río Pilcomayo.

La preocupación por el desastre ambiental que afecta a Potosí y sus cursos de aguas superficiales ha sido materia de proyectos que deberían conducir al reasentamiento de los trapiches ladera abajo. Singular es el hecho que la reubicación requiere de tecnologías que permitan tratar de manera efectiva los relaves, para lo que se ha proyectado construir un tranque de relaves que almacene los desechos líquidos de la minería de la zona.

Para hacer posible la descontaminación minera, el día 8 de junio pasado fue firmado un convenio marco subsidiario entre los gobiernos de Bolivia y Dinamarca con el objeto de prevenir y mitigar los impactos ambientales de la minería. Del total de 1.660.000 dólares que garantiza el convenio, Dinamarca aporta 1.544.00 dólares.

La primera prioridad se centra en aquellas instalaciones que se encuentran en peligro de colapsar. En éstas acciones están comprometidos el viceministro de minería de Bolivia y la Corporación Minera de Bolivia, COMIBOL.