Dirigen Carta a Gobierno de Chile por comunicador mapuche Pascual Pichún
Red de Comunicadores Mapuche de Chile,
9 de julio de 2010
Referentes de Chile y Argentina, dirigieron una carta al Presidente de Chile sobre la situación del Comunicador Mapuche y Prisionero Político Pascual Pichún Collonao, como asimismo, en este contexto, con relación a diversos hechos que han venido atentando a la Libertad de expresión y en general, sobre la situación de Derechos Humanos con respeto a las reivindicaciones Mapuche.
Pascual Pichún Collonao es comunicador mapuche tiene 27 años, es alumno de la Facultad de Periodismo de la Universidad de La Plata (UNLP), Argentina y se encontraba en dicho País desde el año 2005, tras haber obtenido por parte de las autoridades argentinas la residencia transitoria. Es alumno de cuarto año, es colaborador ad-honorem en la Secretaría de Derechos Humanos de esta unidad académica, e integra distintos proyectos de extensión de la UNLP. Como comunicador ha participado de varios espacios de comunicación en defensa de los derechos de los pueblos indígenas.
Fue detenido el 26 febrero del año en curso por agentes policiales del estado chileno en Temuco, y está preso en la cárcel de Traiguén. Pascual es considerado prófugo de la Justicia chilena desde 2003, cuando fue condenado a cinco años, conjuntamente con su hermano Rafael, condenándosele además al pago de $6.000.000 con costas por concepto indemnización de perjuicios, y al pago de una multa de 10 UTM.. En esas circunstancias, fue procesado en un juicio claramente irregular, como autor de un atentado incendiario cometido a un camión maderero en el año 2002 en las cercanías de la localidad donde vive junto a su familia.
Paralelamente, incluso, al padre de Pascual se lo condenó, con la Ley Antiterrorista que impone penas tres veces superiores para delitos comunes, resolución dictaminada por la Corte Suprema, a pesar de que habían sido absuelto en instancias anteriores, demostrando la persecución política - judicial que ha atravesado toda la familia
En la actualidad, diversas manifestaciones y expresiones se han realizado en la Argentina y que han involucrado la solidaridad de diversos personeros académicos, sociales, de Derechos Humanos y Políticos ante las representaciones diplomáticas del estado chileno, para exigir la libertad del joven Mapuche, las que continuarán hasta obtener el propósito.
Para las organizaciones la situación de Pascual Pichún Collonao no es un hecho aislado, es parte de lo que ha tenido que sufrir en el devenir histórico el Pueblo Mapuche de una enorme violencia estructural, las que, a juicio de estas, se siguen proyectando hasta el presente, particularmente como reacción ante legítimas reivindicaciones por tierras ancestrales, como lo ocurrido a esta familia; O como medio para enfrentar la protesta social frente a nefastos proyectos de industrias extractivas y energéticas y actuar a favor de grupos económicos en desmedro de grandes mayorías, sus Derechos, sus soberanías, su seguridad colectiva, de bienes comunes y el medio ambiente.
Por las razones expuestas, Hicieron un urgente llamado al Gobierno a velar y garantizar los Derechos Humanos y trabajar activamente para terminar con este tipo de prácticas de sistemáticas violaciones, que son reflejadas en la situación que atraviesa el Comunicador y Prisionero Político Mapuche Pascual Pichún Collonao, por quien exigen su libertad.
"Creemos firmemente que la militarización, la criminalización, la judicialización y prisión, la persecución y hostigamiento de personas y organizaciones vistas como "enemigos internos", no son caminos viables para enfrentar temas de fondo y que a toda luz son absolutamente legítimos en cuanto a su reclamación", señalaron las diversas organizaciones de Chile y Argentina.
Las organizaciones le señalaron al Presidente lo siguiente:
- Conminamos a su Gobierno para afrontar debidamente las obligaciones estatales que deben asumir en materia de Derechos indígenas y cumplir con las diversas medidas que las normas y el sistema internacional de Derechos Humanos requiere.
- A su vez, a la utilización de los mecanismos pacíficos de resolución de conflictos que establecen las normas internacionales de Derecho, principalmente frente a los hechos que son de carácter político e histórico como los conflictos por tierras ancestrales y de proyectos de inversión en tierras indígenas.
- También, considerando el origen del conflicto por el cual Pascual Pichún está preso, dar implementación eficiente para los procesos de demarcación y restitución de Tierras ancestrales a comunidades, como parte del conflicto histórico y actual del estado chileno y que han sido conminados a cumplir por órganos como el Comité de eliminación de la discriminación racial y de los Derechos Civiles y Políticos de la ONU, atendiendo la importancia de un territorio suficiente para el desarrollo y Bienestar de un Pueblo.
- Poner fin a la violencia estructural del estado hacia la protesta social Mapuche, particularmente en hechos que tienen que ver con legítimas reclamaciones en materia de demandas de tierras y/o defensa de territorios. Aberrante es la aplicación de Leyes represivas como la Ley antiterrorista, como también, los atentados a la Libertad de expresión en estos territorios o la existencia de instituciones fácticas como la competencia de los tribunales militares en causas civiles, tal como ordena la Corte Interamericana de Derechos Humanos de la OEA.
"Sr. Presidente, anhelamos por el bien de Chile y sus Pueblos, que existan las aperturas necesarias para que abran nuevos procesos donde se avance a una mayor y mejor democracia, participación, inclusión, respeto y tolerancia, bajo la premisa del reconocimiento de su diversidad y justicia", indicaron.
Entre otras agrupaciones, suscribieron: La red de Comunicadores Mapuche, Colectivo editorial Mapuexpress, el grupo de trabajo por Derechos Colectivos, la Comisión Pascual Pichún Libre (Argentina); Y representaciones de los Pueblos Originarios en El Consejo Federal de Comunicación Audiovisual de la argentina.
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