a Página inicial del Observatorioa Página inicial del Observatorio  

Plaguicidas Domésticos:

No permitas que invadan tu casa

Plaguicidas de Uso Doméstico, Sanitario y Veterinario registrados en Chile. Un Mal Remedio para la Salud (1)

Como usuarios/as y consumidores/as de plaguicidas de uso doméstico encontramos en el mercado cientos de productos que principal o secundariamente contienen entre sus componentes sustancias catalogadas como pesticidas.

La industria química define a los pesticidas agrícolas y que además tienen un uso doméstico como "toda sustancia que tiene capacidad para controlar, prevenir, destruir, repeler o mitigar efectos indeseados provocados por hongos, insectos, bacterias, ácaros, nemátodos, malezas, etc".

Los modernos pesticidas sintéticos se han utilizado en forma masiva desde mediados del siglo XX. Tras reconvertirse la industria militar luego de la II Guerra Mundial fueron promovidos desde la industria y los gobiernos como solución para acabar con el hambre y las enfermedades en el mundo dando inicio a lo que se llama la ‘Revolución Verde’. Es cierto que muchos de los vectores transmisores de enfermedades endémicas como la malaria y el dengue fueron controlados en una primera etapa con los pesticidas desarrollados.

Durante las primeras épocas reinaron los pesticidas del grupo de los organoclorados, como el DDT, Clordano, Aldrin, Endrin, Dieldrin y Lindano, plaguicidas de amplio espectro de control y con una mediana toxicidad aguda, pero que posteriormente dejaron en evidencia graves contaminaciones ambientales debido a su alta persistencia en el medio ambiente.

Irrumpen a continuación en el mercado, los plaguicidas organofosforados y carbamatos, de amplio espectro de acción, alta toxicidad aguda y baja persistencia en el ambiente. Las últimas generaciones de pesticidas están representadas por los llamados piretroides, de menor rango de acción para destruir especies no blancos de las aspersiones.

Los plaguicidas o pesticidas tienen como condición inherente su capacidad de matar, son biocidas que combinan un ingrediente activo, el que destruye la plaga o peste, acompañado de uno o varios ingredientes inertes que les permiten diluirse, adherirse, persistir sobre el ambiente en que son puestos para controlar el blanco, y aumentar su poder de control, poseen además impurezas o subproductos no deseados del proceso de fabricación, algunos tan conocidos como las dioxinas, consideradas el tóxico más potente identificado.

Para dimensionar el riesgo que puede tener para la salud de los/as usuarios/as de pesticidas la exposición directa o indirecta a estas sustancias, nos remitimos a la identificación del problema en la introducción del manual "Reconocimiento y Manejo de los Envenenamientos por Pesticidas" (Quinta Edición, 1999) que entrega la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos de Norteamérica -conocida por su sigla en inglés EPA- a los profesionales de la salud de ese país.

"En la actualidad, el envenenamiento por pesticidas es una enfermedad comúnmente no diagnosticada o pasada por alto en los Estados Unidos".

" Este manual trata casi por completo, con los efectos dañinos de los pesticidas a corto plazo (agudos). Aunque es obviamente importante, el tema de los efectos crónicos es demasiado complejo para ser tratado exhaustivamente en un manual designado como guía para manejo de emergencias. Sin embargo el tratamiento adecuado de exposiciones serias a pesticidas representa un paso importante para evitar enfermedades tanto crónicas como agudas".

"Aproximadamente el 90% de los casos sintomáticos envuelven solamente síntomas menores de la clase que podría ser tratada típicamente en el hogar con dilución o mera observación. Sin embargo es mucho más probable que siete de las diez principales categorías ... (organofosforados, piretrinas/piretroides, desinfectantes con hipoclorito, carbamatos, cloruros orgánicos, herbicidas con fenóxido y los rodenticidas anticoagulantes) requieran atención médica (2)".

NUESTRA REALIDAD

Lo reseñado anteriormente lo podemos trasladar a nuestra realidad sin mayores variaciones, la cantidad de casos de envenenamiento por pesticidas que son ignorados por la población, sin requerir ayuda en los centros asistenciales de salud son la gran mayoría.

Los casos reportados de intoxicación por el Sistema de Salud Público (el sistema privado no los reporta) están subestimados en su real magnitud, pues en la mayoría de los servicios de salud no está implementado un sistema de alerta sobre este tema. La información sobre intoxicaciones por pesticidas pesquisados por el sistema de salud, (el modelo de vigilancia chileno es voluntario y por lo tanto parcial) coincide en un gran porcentaje, con la lista de pesticidas nombrados por EPA.

De las 659 intoxicaciones por estas sustancias registradas en el sistema público de salud en el 2001, 354 casos fueron accidentes laborales en los que la mayoría de los pesticidas involucrados corresponden a pesticidas de uso agrícola; 161 casos asociados a contacto de niños, mujeres y ancianos con pesticidas de uso doméstico principalmente dentro del hogar; y 135 casos a intentos suicidas con pesticidas de ambas categorías. En un porcentaje de casi el 30% el pesticida causante identificado, fue un organofosforado y en un 10% una piretrina/piretriode (en un 24% de los 659 casos, el pesticida no fue identificado, el que puede ser un síntoma de una falta de rigurosidad de la pesquisa en los centros de salud en que el sistema de alerta está implementado)

Los pesticidas, como bien lo definen los mismos industriales, son productos con capacidad de "matar" a ciertas especies o "prevenir" que otras se reproduzcan. En consecuencia, producen los mismos efectos sobre el ser humano y toda la vida que lo rodea, sólo es cuestión de la dosis, frecuencia y extensión de la exposición, además de las condiciones ambientales en que éste vive, las características genéticas -que lo hacen más o menos vulnerable- que hacen que se manifiesten los síntomas de una intoxicación aguda, una intoxicación sub-clínica o daños en el mediano o largo plazo.

Identificados los problemas a que están expuestas las personas contaminadas con pesticidas domésticos, surgen las siguientes inquietudes:

- ¿Cómo se explica que habiendo Códigos de Conducta promovidos por Organismos Internacionales como FAO y adoptadas como normas por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) para los pesticidas de uso agrícola; los pesticidas de uso doméstico, que usan los mismos ingredientes activos que los agrícolas, estén "libres" de toda norma?

- ¿Cómo es posible que productos que tienen la capacidad de matar, de contaminar el medio ambiente, nuestros alimentos y mascotas se promocionen por TV y otros medios de comunicación sin alertar de sus potenciales peligros?

- ¿Cómo se explica que exista una infinidad de "destructores, repelentes y preventivos" incorporados en ceras para pisos, pinturas y madera de construcciones en que viven hombres, mujeres en edad fértil, niños/as y ancianos/as, sin claras advertencias?

- ¿Qué mediante madres e hijos/as se promocionen estos productos para acabar eficientemente con la pediculosis, es decir pesticidas que matan los piojos sobre el cuero cabelludo?.

- ¿Cómo es posible estos venenos se vendan en los mismos locales en los que compramos los alimentos y que estén dispuestos muy cerca de ellos?

Los pesticidas domésticos, en su gran mayoría, tienen los mismos ingredientes activos, y los mismos "excipientes", "propelentes," "coadyuvantes" y "solventes" –ingredientes secundarios- que los pesticidas agrícolas. En algunos casos, estos complementos son llamados genéricamente como "ingredientes inertes" respecto de los cuales es imposible conocer su composición exacta, pues son secreto industrial.

Uno de los elementos calificados como "ingrediente inerte" es el formaldehído, presente en productos comerciales tales como K-othrina, Raid y Renegade y en ceras para pisos como Cera Líquida Arela. Esta comprobado que la exposición continua y permanente a esta sustancia pueden producir cáncer.

¿Qué sucede entonces con los ingredientes activos de esos pesticidas, sumados a los ingredientes inertes?, ¿qué tipo de sinergías pueden producir?, ¿cuántas veces multiplican su poder destructivo?... Estas son incógnitas que hoy no tienen respuesta.

NOTAS

1) Este documento es una síntesis de la versión preliminar del estudio "Plaguicidas de Uso Doméstico, Sanitario y Veterinario registrados en Chile. Un Mal Remedio para la Salud" del Observatorio Latinomericano de Conflictos Ambientales (OLCA). Estudio desarrollado por el médico cirujano, doctor Enrique Morales.

2) Información sobre 22.433 casos reportados de personas menores de 20 años en el año 1996.