|
Conflictos ambientales en República Dominicana
Fuente:
Clave Digital,
21 de febrero de 2010
Según el contrato, el Estado quedó a cargo de remediar los daños ecológicos dejados por la Rosario Dominicana para lo cual la minera se comprometió a aportar US$37.5 millones
Barrick se lleva el oro y República Dominicana el pasivo ambiental
Kaelis Bautista/Clave Digital
Con el Contrato Especial de Arrendamiento de los Derechos Mineros de Pueblo Viejo, la empresa Barrick Gold ha hecho el gran negocio, al aceptar la mina para la explotación de oro, pero no el pasivo ambiental que ya existía y del cual deberá encargarse el Estado. La opinión es del viceministro de Áreas Protegidas y Biodiversidad de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Eleuterio Martínez.
“Como persona y como dominicano me da miedo la Barrick, porque no hay ninguna garantía de que ellos se vayan a preocupar por este terruño”, insiste. El funcionario destaca que “ese es el gran negocio para ellos, pero no para nosotros”.
Las compañías canadienses Barrick Gold (60%) y Goldcorp (40%) conforman la inversión de la empresa Pueblo Viejo Dominicana Corporation (PVDC). La administración de la empresa está a cargo de Barrick. A principios de 2006, Barrick asumió el proyecto minero Pueblo Viejo, mediante la adquisición de los activos de la canadiense Placer Dome, que desde 2001 tenía los derechos de explotación de la mina.
Se estima que remediar el pasivo ambiental dejado por la Rosario Dominicana debido a la explotación de la mina de 1975 a 1999 tendrá un costo de U$75 millones. En el Contrato Especial de Arrendamiento de Derechos Mineros (CEAM), PVDC acordó cubrir 50% y hasta un límite de US$.37.5 millones los costos de capital requeridos para remediar los daños medioambientales históricos dejados por la Rosario, pero que quedaron como responsabilidad del Estado.
Sin embargo, para Martínez el pasivo ambiental “es el gran dolor de cabeza, es el punto negro, porque nadie sabe cuánto es, ni cuánto es el peligro que encierra”. Indica que el Estado no tiene dinero para resolver el problema del pasivo ambiental. Y porque el Estado se ha quedado con la carga del pasivo histórico, el contrato es criticado por ambientalistas, ecologistas, dirigentes comunitarios, populares y autoridades municipales de la provincia Sánchez Ramírez y de Santo Domingo, quienes proponen su revisión. Dirigentes comunitarios y populares del municipio de Cotuí se proponen realizar un programa de movilizaciones y protestas.
En un recorrido por la mina de Pueblo Viejo, ejecutivos de la Barrick Gold informaron que han invertido en las instalaciones mineras US$900 millones. Fernando Sánchez Albavera, director ejecutivo de Barrick, Méjico Ángeles Lithgow, director de Asuntos Gubernamentales y Regulatorios, y Augusto Chung, gerente de Proyecto País, dijeron que la construcción de las instalaciones de la mina lleva un avance del 15% y que las operaciones comenzarán a finales de 2011.
Rescate. Los ejecutivos manifestaron que en materia de medioambiente, en el interior de la mina Barrick ha invertido US$100 millones. De hecho, la compañía ya instaló un vivero que produce al mes 20 mil plantas de palma real, orquídeas silvestres, pinos, samán y acacias, entre otras especies, para reforestar la zona interior del complejo minero. “Respecto a lo que está fuera de la mina, lo que no es responsabilidad nuestra, el contrato establece que la empresa le tiene que regalar, donar al Estado, US$37.5 millones para el rescate medioambiental y además, con los flujos de este proyecto, vamos a contribuir con el Estado para que pueda aumentar ese fondo, si es que el costo es de alrededor de US$75 millones”, dijo Sánchez Albavera.
Mientras los ejecutivos de la Barrick expresan que han limpiado las sustancias peligrosa que dejó la Rosario Dominicana en el área donde funcionarán las instalaciones de la mina, al lado del complejo permanecen las aguas contaminadas de la presa de cola del río Mejita. También en la carretera que lleva a la presa de Hatillo las aguas sulfurosas de la Rosario convirtieron al Margajita en un río rojo. Por el color, la ribera del afluente recuerda a un pedazo del planeta Marte.
Sánchez Albavera dice que hay que reforzar la presa de Mejita y darle tratamiento a las aguas, y que la Barrick será la conductora de ese proceso desde el punto de vista técnico. Además, explicó que la Barrick va a construir una nueva presa con una planta de tratamiento de las aguas.
Luis Carvajal, del equipo ambiental de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, indica que aunque los ejecutivos de la Barrick hablan de que aportarán US$37.5 millones como contraparte, colocan un componente en la cláusula que es ilegal y lesiona la soberanía del país. “En vez de ser el Ministerio de Medio Ambiente el que revise los planes ambientales de la Barrick y los apruebe, es el Gobierno que -según esa cláusula- tiene que someter a ellos (a la minera) sus planes porque supuestamente ellos van a dar una parte”, dijo.
El viceministro de Medio Ambiente, Martínez, entiende que, por escrito, “se hace de todo” y después el problema radica en el seguimiento. “La palabra clave es ‘seguimiento’, quién le va a dar seguimiento a la Barrick; primero, porque es un monstruo y tiene que haber autoridades muy bien plantadas para que se cumpla, no solo el contrato, sino lo que dice la ley”, expresa Martínez. Insiste en que hay condiciones de ese contrato “que dan miedo”, pues como empresa de explotación minera “no es a rezar que va ahí, sino a seguir arañando las entrañas a la tierra”.
Para él, a la Barrick le ha sido muy cómodo porque la licencia ambiental con la que va a operar corresponde a la que compró a Placer Dome. “Tiene la ventaja que no solamente va a trabajar donde estaba Placer Dome, sino en otros frentes que tienen oro y que van a generar problemas, porque lo del pasivo ambiental fue lo que dejó la Rosario, pero ella va a seguir generando pasivos ambientales”, agregó.
Según Carvajal, que la Barrick vaya a operar con la misma licencia de Placer Dome es una “barbaridad”, pues la compañía está ampliando nuevos frentes.
Los ejecutivos de la minera recuerdan que la inversión prevista por Placer Dome en el proyecto Pueblo Viejo era sólo de US$336 millones, pero desde que Barrick adquirió la concesión la inversión es casi 10 veces mayor. La inversión de la Barrick, dicen, es del orden de los US$3,000 millones, de los cuales US$375 millones son para remediación ambiental.
El dirigente sindical y ecologista del municipio de Cotuí, Bernardo García Santos, teme que como la Barrick Gold tendrá nuevos frentes, comience a explotar primero el oro en los óxidos y luego queden los sulfuros.
La Rosario, que operó de 1975 a 1999, explotó los óxidos y dejó los sulfuros que crean un grave problema de contaminación. Sobre el tema, Carvajal indica que cuando se discutía el contrato con Placer Dome el objetivo fundamental era abordar el área de los sulfuros para la reducción del pasivo ambiental.
CIFRA
20
millones de onzas de oro es la reserva probada en la mina de Pueblo Viejo, según un documento de la empresa canadiense Barrick Gold.
MOVIMIENTO AMBIENTALISTA
El alcalde de Cotuí se une a quienes plantean la revisión del contrato
El alcalde del municipio de Cotuí, Bienvenido Lazala, se suma a las voces que demandan la revisión del contrato con la Barrick Gold.
"Si el Congreso no revisa ese contrato habrá grandes confrontaciones.", advierte el alcalde, quien alega que la provincia Sánchez Ramírez no tiene una garantía de que se vaya a proteger el medio ambiente.
Con el alcalde coinciden el dirigente comunitario Guillermo Hernández, Aramis Vicente, miembro de los Derechos Humanos, y Oscarlin Figueroa, del Movimiento Juvenil Comunitario de Cotuí.
"En los próximos días la juventud de Cotuí se va a lanzar a la calle con el apoyo de las organizaciones de todo el país", adelantó Figueroa.
Mientras, el Foro Social Alternativo, a través de Fidel Santana, anunció que organiza un programa de protestas, por considerar que el contrato es un "desastre" porque el Estado es quien asume el pasivo ambiental. Santana indica que la Barrick usará para sus operaciones el agua de la presa de Hatillo y eso generará un impacto negativo.
El dirigente sindical y ecologista Bernardo García expresó que la Rosario sólo dejó en Sánchez Ramírez los hoyos de los sulfuros, que siguen contaminando las fuentes de agua, incluida la presa de Hatillo.
El vice ministro de Áreas Protegidas y Biodiversidad, Eleuterio Martínez, afirma que la presa de Hatillo mantiene una contaminación muy fuerte. Y el alcalde de Cotuí considera que ese contrato es lesivo a los intereses del país, debido a que el Estado dominicano comenzaría a cobrar la Participación sobre las Utilidades Netas cuando la Empresa Pueblo Viejo Dominicana Corporation logre alcanzar una rentabilidad de un 10% y recupere su inversión.
Ver mapa más grande
|
|