a Página inicial del Observatorioa Página inicial del Observatorio
Declaración Pública

Santiago, 22 de marzo de 2004


Contaminación ambiental en Andacollo:

Minera Carmen de Andacollo infringe nuevamente la ley

Desde el año 1997 la comunidad de Chepiquilla en la Cuarta Región, viene realizando una serie de acciones tendientes a revertir una situación ambiental que pone en serio riesgo la vida de sus habitantes. La instalación de la Minera Carmen de Andacollo y la construcción de las llamadas pilas de lixiviación de esta misma compañía, han provocado desde sus inicios problemas en la calidad del aire y una marcada contaminación ambiental producto de la temida lluvia ácida que cubre los árboles y techos de las casas del sector.

De acuerdo a las recientes denuncias de la comunidad, la citada empresa minera vulneró nuevamente la normativa que prohíbe el uso de aspersores mientras no existan las condiciones de viento necesarias capaces de dispersar las partículas contaminantes, las cuales sin este proceso se propagan en dirección a Chepiquilla. Una situación que volvió a repetirse el pasado 17 de marzo pese al informe entregado por el Servicio de Salud de Coquimbo luego de comprobar en terreno que las mallas que colindan con las pilas de lixiviación se encontraban saturadas de sulfato, infringiendo de esta forma la resolución Nº 3399 de dicho servicio público. De acuerdo a lo señalado en este informe, la empresa infractora trabajó durante ese fin de semana con camiones de alto tonelaje sin regadío de los caminos interiores.

Por lo anterior, la comunidad de Chepiquilla representada por su Junta de Vecinos, y el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales OLCA, demanda una urgente y rigurosa fiscalizaciónde parte de servicios públicos como el Ministerio de Salud, el Servicio Agrícola y Ganadero SAG y la Comisión Nacional del Medio Ambiente CONAMA.

La comunidad de Chepiquilla, hace partícipe su preocupación a la autoridad, exigiendo la pronta entrega de resultados concretos a un problema ambiental que se arrastra de años y que afecta a sus familias y su entorno. Los habitantes de esta localidad denuncian el reiterado incumplimiento de la empresa y exigen además la aceleración de los estudios que realiza el Servicio de Salud a la población y a los niños en particular.

Desde que estalló el conflicto en 1997, los habitantes de Chepiquilla han mantenido una permanente actitud de denuncia a pesar de la postura asumida por la autoridad, la cual en reiteradas ocasiones ha actuado a favor de la empresa acusada. La comunidad de Chepiquilla, mantiene sus esperanzas y espera que el Gobierno cumpla su función de resguardar el bien social, tarea que debiera expresarse a través de una ejemplar sanción hacia la empresa infractora.