Empresa niega información técnica sobre siembra de maíz transgénico

- Costa Rica:

07 de Noviembre de 2012

Empresa niega información técnica sobre siembra de maíz transgénico

La empresa Delta and Pine, que pretende sembrar maíz transgénico en Costa Rica, presentó una recusación para que la Federación Ecologista no tuviera acceso a los documentos técnicos, presentados ante la Comisión Técnica Nacional de Bioseguridad.

- El disco compacto con la información de la empresa llegó a las manos de todos los miembros de la comisión presentes, excepto a las de Fabián Pacheco, representante de la Federación Ecologista.

Alex May, presidente de la Comisión, informó verbalmente a Pacheco que fue “recusado por la empresa” por haber adelantado criterio y, por lo tanto, se le negó la información, según informó el propio Pacheco.

De esa forma, Delta and Pine negó brindar la información técnica sobre su solicitud al sector ecologista, que tiene un lugar asignado por ley en la comisión.

Fabián Pacheco, ingeniero agrónomo y máster en agrobiología ambiental, exhortó a los integrantes de la comisión a rechazar la solicitud en una disertación durante la reunión realizada ayer en las instalaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería.

“Las variedades de maíz que pretenden cultivar a cielo abierto en Costa Rica han sido prohibidos en otros países”, dijo Pacheco a Elpais.cr al salir de la reunión.

A la cita acudió gran cantidad de ciudadanos convocados por Bloque Verde, colectivo ecologista que ha enfrentado a los cultivos transgénicos junto a otras organizaciones desde hace años en Costa Rica.

Pacheco también resaltó la necesidad de investigar las variedades de maíz en Costa Rica, antes de impactarlo con una contaminación transgénica.

Pacheco argumentó que “no hay investigaciones sobre las variedades de maíz criollo, en Costa Rica, no existen estudios técnicos sobre el acervo cultural y patrimonial que significa el maíz en la región. Se intuye que hay variedades únicas en el Sur, en Talamanca y en el Valle Central y, obviamente, en Guanacaste por su herencia mesoamericana, pero debe investigarse para que sepamos a qué nos enfrentamos cuando liberamos al campo una variedad transgénica de este cultivo”.

Además, Pacheco alertó que “ya tenemos el caso de México, en donde muchas de sus variedades ancestrales de maíz se perdieron para siempre, por la contaminación genética que produjo la liberación de los transgénicos”.

La Comisión Técnica Nacional de Bioseguridad la conforman dos representantes del ministerio de Ambiente, Energía y Mar, dos del ministerio de Agricultura y Ganadería, uno del ministerio de Ciencia y Tecnología, uno de la Oficina Nacional de Semillas, uno del sector académico, uno de la Red de Coordinación en Biodiversidad y uno de la Federación Ecologista.

La empresa Delta and Pine pretende liberar en el campo cerca de 15 hectáreas de variedades de maíz transgénicos patentados por Monsanto.

Además de Delta and Pine, también Semillas del Trópico pretende solicitar cultivos transgénicos pero no aportó la documentación necesaria por lo que aún no ha ingresado su solicitud.

Monsanto decidió cerrar sus oficinas en Costa Rica y retirar solicitudes propias para liberar cultivos en el campo costarricense en 2004, tras las protestas de los ecologistas.

Pacheco dio a conocer un documento del ministerio de Cultura del gobierno de la República con un pronunciamiento que pretende cuidar el patrimonio cultural del país, incluyendo a las variedades de semillas del maíz criollo.

Además, fueron presentadas cartas de oposición a la liberación de los cultivos transgénicos, de la Universidad de Costa Rica, la Mesa Nacional Indígena, la Asociación de Productores de Boruca y decenas de ciudadanos y organizaciones que se manifestaron al respecto.

Asimismo, Bloque Verde hizo circular en las redes sociales una petición de firmas para solicitar a la comisión rechazar las solicitudes de las empresas.

Al cierre de esta edición se habían recolectado 3000 firmas de forma electrónica y 900 firmas en papel de ciudadanos y ciudadanas preocupadas por la salud y el ambiente ante la amenaza del cultivo de maíz transgénico en Costa Rica.

A la hora de la reunión de la comisión fueron presentadas 3415 firmas.

Centenares de activistas y ciudadanos se presentaron ante las instalaciones del ministerio de Agricultura y Ganadería para manifestarse en rechazo de los cultivos transgénicos y en apoyo de las semillas criollas.

Bloque Verde, y otras organizaciones como Sol de Vida de Guanacaste, lleva adelante una iniciativa de conservación e intercambio de semillas criollas.

Fuente:
http://www.elpais.cr/frontend/noticia_detalle/1/74596

1436