- Palestina - Israel - Estados Unidos:28 de Abril de 2025
Israel aniquila a familias enteras en Gaza: más del 94 por ciento de las víctimas de la semana pasada eran civiles
Territorio Palestino – La fuerte escalada de ataques israelíes contra civiles en la Franja de Gaza es profundamente alarmante. Familias enteras, incluidas mujeres y niños, están siendo asesinadas a tasas horribles, mientras que la comunidad internacional no logra detener el genocidio de casi 19 meses de duración.
Por
Euro-Med Monitor
Imagen: Palestinos limpian los restos de tiendas de campaña luego de un ataque aéreo israelí que mató a varias personas, incluidos niños, en la Ciudad de Gaza. 21 de abril 2025. (Omar Ashtawy/Alamy)
Mientras que el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, negó a los medios de comunicación que Israel estuviera atacando a civiles, los aviones militares continuaron llevando a cabo ataques aéreos que mataron deliberadamente a mujeres y niños en la Franja de Gaza. Estos horribles crímenes ya no son la excepción a la regla; más bien, el patrón recurrente de tales atrocidades demuestra una política israelí sistemática que desafía todas las leyes y normas internacionales.
En solo una semana—entre el 20 y el 26 de abril—Israel mató a 345 palestinos e hirió a otros 770, según datos sobre el terreno que indican que al menos el 94% de las víctimas eran civiles. Los niños (51%), las mujeres (16%) y los ancianos (8%) juntos representaron el 75% de los asesinados. Entre las víctimas restantes (hombres adultos), la verificación de campo confirmó que al menos 63 de 81 trabajaban en empleos civiles o profesiones independientes no relacionadas con ninguna actividad militante u organizativa, reforzando aún más la naturaleza predominantemente civil de las víctimas.
No hay pruebas que indiquen que las víctimas masculinas adultas, para quienes no se disponía de datos detallados en el momento de esta publicación, estuvieran involucradas en hostilidades o asociadas con actividades militantes. Israel no ha proporcionado ninguna prueba creíble de lo contrario. Como tal, la presunción legal general de la condición de víctimas civil es se aplica en esta situación, otorgando a aquellos protección total bajo el derecho internacional humanitario, con la carga sobre Israel de que demuestre lo contrario.
| El aumento sin precedentes de víctimas civiles coincide con las continuas declaraciones falsas de Netanyahu que niegan los ataques contra civiles, lo cual es un intento flagrante de engañar a la opinión pública internacional |
El aumento sin precedentes de víctimas civiles coincide con las continuas declaraciones falsas de Netanyahu que niegan los ataques contra civiles, lo cual es un intento flagrante de engañar a la opinión pública internacional y encubrir los crímenes israelíes sobre el terreno. Mientras tanto, una amplia evidencia en el terreno, testimonios en vivo, fotografías y documentación directa confirman que las mujeres y los niños constituyen la mayor proporción de víctimas, y que los edificios, la infraestructura y los refugios restantes de los enclaves están siendo bombardeados de manera sistemática e intensiva. La intención de los objetivos en curso es, sin duda, matar civiles y destruir los cimientos de la vida palestina, acelerando su desarraigo gradual de sus tierras.
En las últimas semanas, el equipo de campo de Euro-Med Monitor ha documentado casos repetidos de familias enteras que han sido eliminadas, así como la focalización deliberada de familias específicas en un patrón que sugiere una clara intención de aniquilarlos. Al continuar fomentando narrativas falsas, junto con la escalada de estos crímenes, el gobierno israelí reafirma su política sistemática de encubrir violaciones y proteger a los perpetradores. Israel y sus aliados están operando en un marco de total impunidad destinado a socavar la justicia, y están revelando inadvertidamente al mundo los fundamentos sesgados del derecho internacional.
Las vidas civiles, incluidas las de niños y mujeres, no son daños colaterales que deben pasarse por alto; estas son personas reales con historias personales, asesinadas deliberada y sistemáticamente sin el reconocimiento israelí de ninguna obligación legal o incluso moral. Proteger la vida de los civiles y responsabilizar a los responsables es un deber jurídico y moral que la comunidad internacional no debe eludir.
Aviones israelíes bombardearon una casa en Khan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, el 28 de abril al amanecer. El ataque mató a 12 miembros de la familia Kaware, entre ellos Zainab al-Majayda y sus seis hijos. Uno de los hermanos al-Majaydada había sido asesinado por Israel tres meses antes.
El ejército israelí ha intensificado recientemente su uso de drones suicidas para atacar las tiendas y hogares de personas desplazadas. Estos drones están equipados con cámaras de vigilancia avanzadas y sistemas de guía, lo que permite el seguimiento preciso y en tiempo real de los objetivos. Esta tecnología, que permite a los operadores monitorear un objetivo hasta el último momento y decidir si atacar o abstenerse, elimina cualquier margen de error o aleatoriedad. Confirma que este tipo de ataques se están llevando a cabo a sabiendas y deliberadamente, en clara violación de las normas de protección civil en virtud del derecho internacional humanitario.
En otro ataque reciente, el Ejército israelí utilizó un avión no tripulado suicida para atacar a una tienda de campaña que albergaba a personas desplazadas en el área de Al-Mawasi de Khan Yunis aproximadamente a la 1:50 a.m. el viernes 25 de abril. El ataque acabó con toda una familia: Ibrahim Khalil Abu Taima (33), su esposa embarazada, Hanadi Shaaban Abu Taima (29), y los dos hijos, Samira (9), Azem (6) y Raafat (4). En la noche del mismo día, aviones israelíes bombardearon la casa de la familia Al-Amour, aniquilándolos casi por completo. La pareja y sus nueve hijos—, incluidos tres niños y cuatro niñas—, fueron asesinados, y solo un niño sobrevivió a la masacre.
Tras la documentación de varios ataques de este tipo de drones, ha quedado claro que la mayoría de las víctimas han sido niños, mujeres y civiles desarmados. Esto demuestra además que Israel está atacando y matando deliberadamente a civiles palestinos en masa como parte del genocidio en curso en la Franja de Gaza.
Los ataques deliberados de los israelíes contra refugios simples—, incluidas tiendas de campaña improvisadas y hogares medio destruidos,— con bombas pesadas o drones suicidas y sin ninguna necesidad militar justificada, revelan una política sistemática destinada a causar el mayor número posible de víctimas civiles e infundir terror entre la población palestina. Estas acciones están explícitamente prohibidas por el derecho internacional.
La mayoría de los ataques israelíes, que atacan sitios puramente civiles, no son seguidos por ningún intento oficial de justificar el ataque. En algunos casos, fuentes militares israelíes afirmarán que un miembro de una facción palestina armada era el objetivo. Sin embargo, estos débiles pretextos no justifican el enorme número de muertes de civiles ni reflejan la magnitud de las pérdidas humanas y materiales causadas por los ataques en curso.
Israel repite rutinariamente la misma afirmación cada vez que la opinión pública internacional se levanta contra sus crímenes, afirmando que estaba apuntando a “milicianos” para justificar sus ataques contra civiles sin proporcionar evidencia concreta y verificable o permitir que cualquier parte independiente verifique estas afirmaciones.
Además, las investigaciones internas que Israel anuncia después de cometer ciertos crímenes han carecido de independencia y seriedad. Obviamente, estas investigaciones no tienen la intención de responsabilizar a los perpetradores o lograr justicia, y sirven principalmente para proporcionar cobertura formal a los soldados y oficiales involucrados. En los raros casos en que se toman medidas punitivas, se limitan a acciones administrativas menores que de ninguna manera reflejan la gravedad de los crímenes cometidos o la gravedad de las violaciones.
Los reclamos de Israel, en sí mismos, no le eximen de sus responsabilidades en virtud del derecho internacional, incluido el deber de llevar a cabo investigaciones efectivas, responsabilizar a los perpetradores y proporcionar reparación a las víctimas. Euro-Med Monitor condena enérgicamente la aceptación automática de acusaciones israelíes sin fundamento, ya que la complicidad silenciosa otorga efectivamente a Israel una licencia para continuar atacando a civiles bajo una falsa cobertura legal, socavando así la sustancia y la efectividad del sistema legal internacional.
Incluso si se supusiera que un combatiente está presente o pasa por una zona, esto no justificaría estas brutales masacres ni absolvería a Israel de sus obligaciones en virtud del derecho internacional y el derecho internacional humanitario. Israel sigue plenamente obligado a defender los principios de humanidad, distinción, necesidad militar, proporcionalidad y precaución. Para garantizar la pérdida mínima posible de vidas civiles y lesiones, estas obligaciones deben respetarse durante la planificación y ejecución de cualquier operación militar, incluida la adopción de precauciones en la elección de métodos y medios de guerra, sin excepción.
Las masacres israelíes contra los palestinos se han convertido en una imagen familiar, que encuentra un silencio casi total a pesar de que el genocidio se ha transmitido en vivo en todo el mundo. Es como si el asesinato de civiles palestinos, abiertamente cometido por Israel y sus aliados sin temor a consecuencias legales o morales, se hubiera convertido en una realidad implícitamente aceptada dentro del sistema internacional.
La indiferencia internacional a este patrón de crímenes no es simplemente un fracaso moral, sino una grave violación de las obligaciones legales de los Estados y la comunidad internacional. Transforma la matanza masiva de palestinos de actos criminales en políticas llevadas a cabo abiertamente ante el mundo entero. El silencio frente a estos crímenes constituye un claro incumplimiento del deber legal de prevenir el genocidio y castigar a sus autores, tal como lo establece la
Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948.
La metodología de asesinatos de Israel refleja una política clara destinada a eliminar a los civiles palestinos en toda la Franja de Gaza, propagar el pánico, privarlos de refugio o estabilidad, forzar repetidos desplazamientos y someterlos a condiciones de vida mortales. Todo esto se ve agravado por los bombardeos israelíes en curso en toda la Franja, incluidos los ataques contra áreas designadas como zonas humanitarias y los ataques contra refugios, incluso aquellos ubicados dentro de las instalaciones de la UNRWA.
Todos los Estados, individual y colectivamente, deben cumplir sus responsabilidades legales emprendiendo acciones urgentes para detener el genocidio en la Franja de Gaza, mediante la aplicación de medidas efectivas para proteger a los civiles palestinos, garantizando el cumplimiento por parte de Israel del derecho internacional y de las decisiones de la Corte Internacional de Justicia; y haciendo que Israel rinda cuentas por sus crímenes contra los palestinos. La Corte Penal Internacional debe volver a dictar órdenes de detención contra el primer ministro y el ministro de Defensa israelíes lo antes posible, de acuerdo con el principio de que no hay inmunidad para los crímenes internacionales.
La comunidad internacional también debe imponer sanciones económicas, diplomáticas y militares a Israel por sus violaciones sistemáticas y graves del derecho internacional. Estas sanciones deben incluir un embargo de armas; el fin de todo apoyo político, financiero y militar; la congelación de los activos de los funcionarios involucrados en crímenes contra palestinos; la imposición de prohibiciones de viaje; y la suspensión de privilegios comerciales y acuerdos bilaterales que proporcionan a Israel beneficios económicos que permiten que continúen sus crímenes.
Fuente:
https://euromedmonitor.org/en/article/6699/Israel-wipes-out-entire-families-in-Gaza;-over-94-percent-of-last-week%E2%80%99s-victims-were-civilians136
