- Palestina - Israel - Estados Unidos:24 de Mayo de 2025
35 órdenes de evacuación desde enero: Israel utiliza el desplazamiento, el hambre como herramientas, los planes para expulsar a los palestinos de Gaza como condición para detener el genocidio
Territorio Palestino - La escalada de desplazamiento masivo de los israelíes en Gaza refleja la condición declarada del Primer Ministro Benjamin Netanyahu para un alto el fuego: la implementación del plan del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para deportar a los palestinos de la Franja. Esto equivale a una admisión explícita de que la agresión entre Estados Unidos e Israel no está dirigida a una facción militar específica, sino a toda la población palestina.
Por
Euro-Med Monitor
Imagen: Palestinos, llevando sus pertenencias y huyendo de las ciudades de Beit Lahia y Jabalia en el norte de la Franja de Gaza hasta el centro y oeste de la Ciudad de Gaza después de las órdenes de evacuación israelíes. Jabalia, Franja de Gaza, 19 de mayo de 2025. (Rizek Abdeljawad/Xinhua/Alamy)
Esta escalada confirma que las acciones de los israelíes en el enclave desde el 7 de octubre de 2023, incluidas las muertes, el hambre y la destrucción, no son incidentes aislados, sino parte de una política sistemática de genocidio. Estas acciones, combinadas con el desplazamiento forzado a gran escala, reflejan un plan político y militar deliberado y coordinado para despoblar la Franja.
Las fuerzas israelíes han emitido al menos 35 órdenes de evacuación en la Franja de Gaza desde enero de este año, afectando a más de un millón de personas. Estas órdenes agravan el daño causado por las emitidas antes de enero, que ya habían resultado en que gran parte de la población fuera desplazada. Israel ahora está intensificando los esfuerzos para confinar a los residentes a un área estrecha a lo largo de la costa sur, un aparente preludio a la expulsión de la Franja, en línea con el “Plan de Trump” recientemente adoptado por Netanyahu como condición para poner fin a las operaciones militares en el enclave.
| La actual campaña de Israel de desplazamiento de los palestinos es la más severa desde que comenzó el genocidio en la Franja de Gaza, particularmente dado el grado de destrucción y trauma que se ha acumulado en los últimos 19 meses |
La última orden, emitida el jueves por la tarde, instruye a todos los residentes de Ghabin, Al-Shimaa, Fadous, Al-Manshiyya, Sheikh Zayed, Al-Salateen, al-Karama, el Proyecto Beit Lahia, Al-Zohour, Tel al-Zaatar, Al-Nour, Abdel Rahman, Al-Nahda y el campamento de refugiados de Jabalia en el norte de Gaza para evacuar y moverse hacia el sur. Esto sigue a una amplia orden de evacuación que afecta a la mayoría de los barrios de la gobernación de Khan Yunis, dirigiendo a los residentes al oeste hacia el área de Al-Mawasi. También se emitieron órdenes adicionales para ciudades y barrios en el norte de Gaza y la ciudad de Gaza, instruyendo a los residentes a moverse hacia el sur.
Cada una de estas órdenes ha sido emitida sin necesidad militar o incluso los pretextos habituales, como el lanzamiento de cohetes desde el área. Esto indica que Israel ya no busca justificar sus acciones ante la comunidad internacional, y que el desplazamiento en sí mismo se ha convertido en un objetivo abierto, uno que es parte de una política deliberada de desarraigo sistemático y que constituye un acto de genocidio en toda regla.
La actual campaña de Israel de desplazamiento de los palestinos es la más severa desde que comenzó el genocidio en la Franja de Gaza, particularmente dado el grado de destrucción y trauma que se ha acumulado en los últimos 19 meses. La campaña coincide con una política de hambre intensificada, la destrucción generalizada de las viviendas e infraestructura restantes y las declaraciones explícitas de intención israelíes de despoblar áreas enteras. Euro-Med Monitor señala que Israel está utilizando el hambre como una herramienta para obligar a los civiles a entrar en zonas designadas para la distribución de ayuda condicional.
La declaración de Netanyahu que describe las condiciones para poner fin a la “guerra”, que respalda explícitamente el desplazamiento de palestinos, en línea con el plan de Trump, revela públicamente la intención de exterminar a todo un pueblo y expulsar a los sobrevivientes. Todo esto se está desarrollando en medio de un silencio internacional casi total, creando un ambiente seguro para que continúen los crímenes en curso de los israelíes y permitiendo una impunidad impactante.
Cientos de miles de civiles se han visto obligados a huir de sus hogares bajo los bombardeos israelíes y los cinturones de fuego, caminando durante kilómetros a pie con las pertenencias que puedan llevar. Estos civiles han buscado refugio en áreas como Al-Mawasi en las gobernaciones de Khan Yunis y Rafah, que ya estaban superpobladas y también han sido objeto de ataques intensificados en los últimos meses. Las recientes redadas en estas dos áreas han matado y herido a cientos, muchos de los cuales se refugiaban en tiendas de campaña.
En condiciones humanitarias extremas, miles de familias se han visto obligadas a huir de sus hogares o refugios sin comida, agua, transporte o un destino seguro. Sin corredores humanitarios ni refugio adecuado, muchos han buscado refugio en áreas superpobladas y altamente expuestas que han sido atacadas repetidamente por los bombardeos israelíes. El desplazamiento en sí se ha convertido en una amenaza existencial constante y un asalto implacable a la dignidad de los palestinos, ya que ningún lugar en la Franja de Gaza ofrece ninguna seguridad verdadera.
Mientras que Israel recientemente ordenó a los civiles que huyeran a Al-Mawasi, alegando que era “seguro”, los aviones israelíes continuaron bombardeando el área. El jueves por la mañana (22 de mayo), un ataque directo en una tienda de campaña mató a toda una familia palestina: esposo y esposa Ashraf Khreish y Sahar Muhammad Khreish y sus dos hijos, Basil y Ahmed. Esta atrocidad revela que las llamadas zonas de seguridad son, en realidad, motivos de muerte premeditados.
El patrón de las órdenes de evacuación, el hambre deliberada y la distribución de ayuda estrictamente restringida es parte de un plan israelí que avanza claramente hacia su objetivo final: el asesinato en masa y la expulsión de los palestinos restantes de la Franja de Gaza. Los últimos 19 meses y dos semanas de genocidio han incluido el asesinato o las heridas de un mínimo de 175.000 civiles, la destrucción de ciudades enteras, el colapso casi completo de la infraestructura y los esfuerzos sistemáticos de desplazamiento interno para borrar la existencia del pueblo palestino en su conjunto.
El desplazamiento forzado de palestinos es una extensión directa del proyecto colonial de colonos de décadas de Israel, enraizado en la eliminación de la existencia palestina y la incautación de sus tierras. Lo que distingue a esta fase es su escala y gravedad sin precedentes, demostradas por la focalización integral de los 2,3 millones de residentes de la Franja de Gaza desde el 7 de octubre de 2023 a través del genocidio y la negación de los derechos humanos más básicos de las personas. Las condiciones de extrema coerción y privación impuestas al pueblo palestino representan un esfuerzo deliberado para expulsarlo de su tierra natal, no por elección sino como condición para su propia supervivencia. Este es uno de los casos más flagrantes de desplazamiento masivo planificado en la historia moderna.
Todos los Estados, tanto individual como colectivamente, deben cumplir con sus responsabilidades legales tomando medidas urgentes para detener el genocidio en la Franja de Gaza, mediante la implementación de medidas efectivas para proteger a los civiles palestinos; garantizar el cumplimiento por parte de los israelíes del derecho internacional y las decisiones de la Corte Internacional de Justicia; prevenir la implementación del plan de desplazamiento forzado entre Estados Unidos e Israel; y y responsabilizar a Israel y sus aliados más poderosos por todos los crímenes contra los palestinos en la Franja. La Corte Penal Internacional debe aplicar las órdenes de detención del Primer Ministro y Ministro de Defensa israelí lo antes posible, de conformidad con el principio de que no existe inmunidad para los crímenes internacionales.
La comunidad internacional también debe imponer sanciones económicas, diplomáticas y militares a Israel por sus violaciones sistemáticas y graves del derecho internacional. Estas sanciones deberían incluir un embargo de armas; el fin de todo apoyo político, financiero y militar; congelar los activos de los funcionarios involucrados en crímenes contra palestinos; imponer la prohibición de viajar a estos funcionarios; suspender las operaciones de las compañías de las industrias militares y de seguridad israelíes en los mercados internacionales; prohibir el acceso de las empresas involucradas al sistema SWIFT; y y suspender los privilegios comerciales y los acuerdos bilaterales que proporcionan a Israel beneficios económicos que permiten sus continuos crímenes.
Los países con tribunales de jurisdicción universal deben emitir órdenes de arresto contra los líderes políticos y militares israelíes involucrados en el genocidio en curso e iniciar procedimientos legales, incluso con los acusados en ausencia, para cumplir con su obligación legal internacional de enjuiciar delitos graves y combatir la impunidad.
Fuente:
https://euromedmonitor.org/en/article/6735/35-evacuation-orders-since-January:-Israel-uses-displacement,-starvation-as-tools,-plans-to-push-Palestinians-from-Gaza-as-condition-for-halting-genocide87
