Precio de la celulosa
Celulosa contamina Santuario de la Naturaleza

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CELCO hace lo mismo en: Golfo de Arauco - Constitución - Río Mataquito - Misiones (Argentina) - Río Itata

www.valdivianoticias.cl 20 de junio de 2007

"(Lagos) dejó una peligrosa enseñanza, cual es que la participación ciudadana pacífica informada, responsable honesta, no sirve de nada".
"RICARDO LAGOS ESTABA CONSCIENTE DE LA MAGNITUD DEL DESASTRE DEL RIO CRUCES"
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Por Eduardo Israel (*)

Frente a las declaraciones del ex ministro Eduardo Dockendorff y los hechos acontecidos en Mataquito es necesario que los ciudadanos reflexionemos y tomemos conciencia que:

Don Ricardo Lagos estaba consciente y en conocimiento pleno de toda la magnitud del desastre ambiental del Río cruces, y disponía de todas las pruebas testimoniales, científicas fotográficas que le permitían determinar que Celco era el responsable de éste.

Que don Ricardo Lagos, sabía de todos los delitos que había cometido la empresa Celco y conocía de la actitud negligente y desconsiderada con los derechos de los demás con que esta empresa se manejaba.

Que Don Ricardo Lagos sabía que los ciudadanos habían luchado con todas sus fuerzas dentro del marco democrático para aportar las pruebas y hacer las labores de fiscalización que los organismos de su gobierno vergonzosamente no habían hecho.

Que Don Ricardo Lagos estaba conciente que una multitud de ciudadanos nunca antes vista, había marchado, pedido, y solicitado a cuanto interlocutor con capacidad de intervenir en este desastre, así lo hiciera, en una forma que era reconocida por la gran mayoría del país.

Que Don Ricardo Lagos sabía que todos los convenios internacionales vigentes en nuestro país y la ley ambiental, le deban un piso más que sólido y suficiente para aplicar el principio preventivo y detener el desastre del santuario de la naturaleza.

A pesar de todo esto, Don Ricardo Lagos calló, no dio la cara en Valdivia si no hasta fines del 2005 cuando ya se habían muerto o migrado prácticamente todos los Cisnes de Cuello Negro, Taguas y Coipos, cuando ya se habían destruido todas las plantas acuáticas que oxigenaban y ayudaban a limpiar el agua en la más de 5000 hectáreas que conforman el Santuario de la Naturaleza, cuando nuestros ríos se habían contaminado peligrosamente con gran cantidad de metales pesados y compuestos orgánicos persistentes, potencialmente peligrosos para nuestra salud.

Y aun incluso en ese momento, temeroso de caer en una posible ingobernabilidad, por el riesgo que otros grupos atrevieran a manifestarse en defensa de sus derechos, no fue capaz de hacer lo correcto y permitió que se infringiera la ley, que nuestro país faltara a los compromisos internacionales que había suscrito, no respetó los derechos humanos básicos de los ciudadanos que en plena conciencia y compromiso con su medio habían luchado diariamente durante dos largos años.

Con esta cobarde decisión no sólo mostró que su "imagen de valiente defensor de los derechos humanos era otra farsa, anteponiendo la doctrina de su propia seguridad a los derechos básicos de los ciudadanos, sino que también convirtió la tragedia de los cisnes y de los ríos de Valdivia, en la tragedia de la confianza que teníamos en nuestros gobernantes, en la justicia y en la democracia que tanto había costado recuperar.

Con esta cobarde decisión, dejó una peligrosa enseñanza, cual es que la participación ciudadana pacífica informada, responsable honesta, no sirve de nada en las formas actuales de gobierno. Generó en mucha gente un peligrosa inclinación a la búsqueda de formas violentas para defender sus derechos, privó al país de comenzar a caminar un rumbo diferente donde la rentabilidad de unos pocos no se haga a costa del presente y futuro de muchos. Dejó claramente establecido que los Corema, son sólo un organismo de fachada técnico democrática, financiados con nuestros impuestos, para hacerle creer a la gente que hay responsabilidad y conocimiento detrás de las decisiones que se toman.

Con su actitud condenó nuestros ríos a miles de toneladas más de los mismos contaminantes que en sólo tres meses lo destruyeron, permitiendo que una empresa irresponsable continuara dañando impunemente nuestros cursos de agua y nuestro futuro, así como también los de otros habitantes de nuestro país.

A fines de su gobierno y a comienzo del actual, se generaron una serie de medidas altamente mediáticas, que hasta el día de hoy siguen sin implementarse (Plan de Gestión Integral del Santuario, Norma Secundaria del río Cruces, Misión Ramsar, etc.).

Todas las consultas que hemos realizados los ciudadanos respecto de estas medidas no han sido contestadas. La actual presidenta que dijo escucharía a los ciudadanos, parece en este caso estar haciendo justo lo contrario, un marco de hermetismo y falta de transparencia e información se ha cernido sobre el desastre del río Cruces.

El gobierno de Don Ricardo Lagos no tuvo el valor para enfrentar de forma correcta y con altura este problema, el actual, hasta aquí ni siquiera lo enfrenta, el anterior “hacia como que hacia” el actual “hace como que no existe”, cierra las puertas y mientras tanto nuestro ríos se sigue contaminado. Esta actitud ha permitido que Celco ahora acabe por destruir y rematar el río Mataquito.

La empresa actualmente, pretende solicitar un aumento de la producción en Valdivia al 100% para mejora aun más su ya abultada rentabilidad y transformase en los más grandes productores de celulosa del mundo, convirtiendo nuestros ríos y medio ambiente por lo tanto, en los más grandes basurales de desechos de producción de celulosa del mundo.

Esta delicada decisión que compromete aun más el desarrollo sustentable de nuestra futura Región, va a ser tomada nuevamente por un organismo de fachada técnico democrática, la Corema de una región ajena a la nuestra.

Los valdivianos debemos impedir por todos los medios que esto así ocurra, debemos aspirar que estas y todas las delicadas decisiones respecto a esta empresa sean tomadas por quienes seguimos siendo afectados por ella.

(*) Eduardo Israel Arditi
Medico Ginecólogo Oncologo
Profesor Asociado
Facultad de Medicina
Universidad Austral De Chile