Todos los componentes de la nueva organización coinciden en que en nuestro país la distribución de los impactos ambientales de las actividades humanas no es equitativa.

En otras palabras inequidad social en los costos y beneficios de las actividades y sus resultados. Los dirigentes concuerdan que la política que, "el que contamina paga", no favorece en nada al medio ambiente.

El análisis de la realidad ambiental realizada en el encuentro permitió confirmar que el mapa de los problemas ambientales mas importantes del país coincide con los lugares de mayor pobreza. De este modo las comunidades pobres además de sufrir carencias sociales y económicas son castigadas por los efectos de actividades contaminantes.

Frente a esto decidieron crear el mapa nacional de la Injusticia Ambiental, ser solidarios con los ciudadanos que se vean afectados por problemas de medioambiente que afecte su calidad de vida y difundir con charlas y cartillas los derechos ciudadanos ya que como muestra una reciente encuesta el 60 % de los chilenos no reclama sus derechos ya que no los conoce.

Con esta nueva organización se pretende detener la impunidad y el abuso ambiental de que son objeto las comunidades, frente a empresas que se lucran sin pensar en el daño ecológico y calidad de vida de los vecinos. También, que el gobierno asuma su responsabilidad frente a estos hechos y que como mínimo haga respetar las leyes vigentes tanto nacionales como internacionales materia de medioambiente.

El Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA)

Santiago, 26 de enero de 2005